Ser Humano. Confidencias.
“- Leí un pensamiento en un librito, qué, por cierto, no sé quién lo escribió, pero me ayudó
a salir de la confusión en que me encontraba.”
Si tomamos por verdadera esta frase hipotética, aunque sólo sea una persona la beneficiada, este trabajo y esfuerzo ha cumplido su objetivo: servir de reflexión y orientación para la toma de decisiones en las innumerables situaciones conflictivas del ser humano, en sus complejas interacciones en la vida cotidiana consigo mismo, con los demás y con Dios.
Lo que aquí está escrito, no es producto de una persona con sobreabundancia de la sabiduría humana y sobrenatural o que posea el completo control de sus pensamientos, palabras y actos; tampoco que esté pletórico de virtudes, ni mucho menos que sea un modelo a seguir en el cumplimiento de la voluntad de Dios. Es todo lo contrario; pongo mis defectos e inquietudes en segundas personas, con la seguridad de que todos compartimos como hermanos, hijos de esta tierra y de un único Padre, los mismos problemas y afrontamos idénticos retos.
Dentro del contenido, hay mucha referencia a la convivencia humana, a nuestros combates internos y externos y a los asuntos triviales de la vida cotidiana. El texto está diseñado para llegar hasta los núcleos más sensibles y profundos del ser humano; ahí donde esconde su esencia y los motivos de su comportamiento, para removerlos y tratar de sanarlos. También se ensalzan virtudes y actitudes heroicas observadas en los demás, que dan luz con su ejemplo y esfuerzo, para construir un mundo mejor.
Todas estas confidencias, tanto mías como las procedentes de otras personas, se quedarían vacías y sin sentido, si no hubieran sido escritas con el deseo vehemente, de que la humanidad entera tome el camino que la conduzca a su plena realización, esto es, el mensaje de Jesucristo, el Hijo de Dios.